Cuando hablamos de podas vegetales, debemos tener en cuenta que existen distintas Escuelas de actuación sobre los vegetales, donde se desarrollan las pautas generales de control sobre "grandes árboles".

Existe una Escuela  Americana donde se expone que la única excusa para la realización de una poda arborícola sería una mala ubicación, pues SIEMPRE hay que respetar la estructura natural vegetal.

También debemos hablar de una Escuela Francesa de actuación donde el planteamiento para las podas es la solución a distintos problemas que nos puede acarrear la utilización de grandes vegetales en el diseño de jardines y espacios verdes. Es decir, las podas estarían justificadas en todos los casos que fueran necesarias actuaciones de limpieza, formación, mantenimiento, equilibrios, saneamiento, eliminación de peligros, máxima producción de flores y frutos...

Y una tercera Escuela de actuación desarrollada en Alemania de donde nació la Topiaria, es decir, las podas son el refelejo de creaciones que no tinen en cuenta al vegetal como un individuo con interés propio sino que el interés lo desarrolla por la propia actuación de la poda.

Existe una Normativa acerca de los mínimos exigibles para la utilización de Árboles en espacios urbanos donde se especifican las distancias para su colocación en parterres ajardinados,  parques urbanos, aceras, medianas de carreterras, zonas transitadas  y rotondas. 

Lo que deberíamos estar todos los profesionales de Jardinería de acuerdo es que cualquier poda es una herida, que los vegetales no tienen sistema de cicatrización rápido y efectivo, que el conocimiento acerca de sus necesidades biológicas deben ayudarnos a una elección acertada.

Se ha publicado un DECÁLOGO DEL ÁRBOL, donde se quiere manifestar las normas básicas de actuación que publicamos aqui en nuestro blog  porque estamos muy de acuerdo con ellas y es nuestra propia forma de desarrollar nuestra labor en las distintas actuaciones que nos encontramos:

1. La estructura del Árbol nunca es casual, es propia y definitoria del individuo.

2. La corteza es su protección.

3. Escogemos la especie adecuada.

4. Las heridas de poda se cierran mejor con mayor movimiento de savia y menor tamaño.

5. El cuello de cicatrización es importantísimo.

6. Los tejidos naturales no deben eliminarse en tratamientos correctivos.

7. Especies predominantes y naturales de los ecosistemas no tendrán problemas de salud.

8. Debemos aceptar al Árbol tal y como es.

9. Alterar al vegetal nos proporciona en sí mismo un individuo más delicado.

10. Debemos respetar la DIGNIDAD del árbol.

Por supuesto, las podas arborícolas se extrapolan a todos los vegetales que nos encontramos en un jardín: arbustos, enredaderas, planta medio porte, porte bajo...

La profesionalidad de los trabajadores de jardines se muestra en la elección acertada de especies, marcos de plantación, número de individuos, etc...

Cualquier duda acerca de posibles actuaciones de poda vegetal debe estar asesorada por profesionales porque lo que sí es determinante en ella es que.. UNA MALA PODA ES EL PRINCIPIO DEL FIN DE UNA VIDA.